Antecedentes
Hasta hace poco, el aborto era legal en Ecuador pero solamente en caso de que el embarazo pusiera en peligro la vida de la madre y el peligro no se puede evitar por otros medios (causal que raramente se ha aplicado). La única otra causal permitida era “si el embarazo proviene de una violación o estupro cometido en una mujer idiota o demente.”
Ante esta realidad, y aprovechando el espíritu supuestamente progresista del gobierno de Alianza País, las organizaciones que trabajan por la defensa de los derechos sexuales y reproductivos, así como personas no organizadas, empezaron a exigir que se incluyera la despenalización del aborto en caso de violación en el debate legislativo sobre la reforma al código penal.
Ante la posibilidad del debate del tema en la Asamblea Nacional del Ecuador, Rafael Correa apareció en medios de prensa amenazando con renunciar en caso de que se tratara el tema e implementó una censura a todas las asambleístas del partido de gobierno.
Por otro lado, unos meses antes de este incidente se realizó una encuesta con una muestra representativa a nivel nacional en donde se evidenció que el 65% de l@s ecuatorian@s estaban de acuerdo con la despenalización del aborto en casos de violación.
El proceso
Resultados
El objetivo principal, que se debata sobre el tema de la despenalización del aborto en la asamblea, no fue logrado porque como se explicó, no dependía de los intereses y preocupaciones de la población sino del capricho del presidente. A pesar de ello logramos poner el tema en boca de muchas personas y con ello se produjo un debate constructivo en la sociedad. Muchas personas se dieron el tiempo para reflexionar sobre la justicia de apresar a una mujer por no querer seguir adelante con un embarazo producto de una violación. Medios de comunicación nacionales e internacionales recogieron la noticia de la iniciativa y eso generó una mayor difusión de los mensajes y un mayor interés en el tema, que nunca había sido debatido en un foro tan grande.